La formación de la sexualidad, que satisface la necesidad de los seres humanos de establecer vínculos con otros individuos a nivel social, emocional e íntimo, pone de manifiesto la importancia de que este tema sea abordado desde la infancia. Esto implica que es un componente necesario de la existencia de todos.
La felicidad y el bienestar físico, emocional, social y mental son producidos por una sexualidad sana y adecuadamente desarrollada. Por tanto, siempre que se viva sin discriminación y sin violencia, disfrutar de experiencias sexuales plenas y seguras aporta enormes beneficios a todo tipo de personas.
Por eso, los escort in Marbella son una manera de destrabar el tabú social en torno a los servicios de acompañantes. Esta relación del cliente con estas hermosas chicas tiene que verse como cualquier otra transacción comercial.
Sobre todo porque las acompañantes difieren de las prostitutas, ya que el sexo puede estar o no dentro del contrato laboral. Por lo general, los clientes contratan a estas chicas para eventos sociales como cenas, fiestas o reuniones que pueden acabar o no, en el acto carnal.
Por ejemplo, las escorts vip suelen ser chicas muy bien preparadas y empoderadas que se dedican a esto como cualquier otra profesión u oficio. Suelen tener estudios universitarios y estar capacitadas para enfrentar conversaciones y situaciones sociales en las que entablar conexiones interpersonales está por encima de las virtudes o servicios sexuales que puedan ofrecer.
La sexualidad debe concebirse de forma responsable y con respeto a la condición humana y esto hacen estas chicas, pues poseen acceso a una educación sexual adecuada y a los conocimientos necesarios para su crecimiento y sin violar los derechos de nadie.
Este tipo de servicios traspasa fronteras y es posible tener un contacto sex con escorts de Buenos aires como en cualquier otro punto del planeta y no puede concebirse como una ocupación que pueda ser juzgada socialmente.
La aparición de portales de clasificados para adultos como Skokka es una muestra de que el sexo y la sexualidad forman parte de la vida cotidiana.
Sexualidad y salud sexual
La salud sexual repercute en todos los aspectos de la vida de una persona. Este es un componente necesario para moverse por el mundo. De allí la importancia de comprender la sexualidad que exige reconocer cómo afecta a las distintas facetas del ser humano. Es decir, física, mental, emocional y social.
La sexualidad influye en todo el desarrollo de la personalidad y en la satisfacción personal. Aunque esta sigue siendo un tabú en algunas familias y sociedades, las escuelas y programas gubernamentales ponen a disposición de los niños y jóvenes más acceso a una información adecuada.
Para promover una sexualidad sana (y por ende una vida sana), diversos organismos del Estado en muchos países, así como organizaciones no gubernamentales han creado campañas y programas de educación sexual que se han desarrollado con frutos altamente positivos.
Pero, es la sociedad, la que debe ir derrumbando la estigmatización en torno a temas como las preferencias sexuales, la existencia de trabajadoras del sexo, las escorts e industrias como la pornografía que general millones de dólares al año.
Si la sociedad con la ayuda de expertos sexólogos y sociólogos logra acabar con estos tabúes los ciudadanos podrán desarrollar una sexualidad sana. Ahora, más que nunca, gracias a la tecnología y a la posibilidad de campañas online, se puede lograr este objetivo.
Al lograr empoderar a la mujer y a las minorías sexuales, ya no habrá cabida para la violencia, la explotación sexual y demás desgracias que rodean al sexo y a la sexualidad. Las y los escorts (porque también hay hombres que cumplen esta función) son muestra de empoderamiento y de asumir este trabajo como cualquier otro.
La educación sexual debe comenzar en casa, continuar en la escuela y seguir en el instituto. Se deben crear, además, marcos legales para que toda la sociedad tenga acceso a información de calidad, anticonceptivos y métodos para evitar infecciones de transmisión sexual.
De esta manera, ya no habrá paredes que separen la vida de las personas por preceptos morales, sino que se abordará el sexo, la salud sexual y la sexualidad como se aborda la enseñanza de la gramática o las matemáticas.